viernes, 15 de marzo de 2019

Los cítricos sin objetivo

Lo cagado, por no decir "ridículamente triste", es que hay gente que con tal de criticar a #AMLO, en sus apenas poco más de 100 días, son capaces de estar a favor hasta de #EPN (Enrique Peña Nieto) y #Fecal (Felipe Calderón Hinojosa), sin importarles los cientos de miles de personas asesinadas y desaparecidas, más los millones de desempleados y la altísima corrupción (eso sí, de los primeros lugares a nivel mundial).

Prefieren criticarlo por sus conferencias matutinas (como si las vieran y les hiciera daño), en lugar de entender que realmente trata - si podrá o no, es otro asunto - de cambiar radicalmente la situación nefasta en la que este país se encuentra.

Es como cuando todos lo criticaron por los "segundos pisos", hasta gobiernos estatales lo hicieron, pero ahora todos disfrutan esas ventajas y, los gobiernos estatales hasta los presumen en sus campañas políticas. Es un político más, y sí, no sé puede confiar en ellos, pero tampoco se deben, ustedes los críticos, desdoblar en tremenda estupidez olvidando por completo la objetividad sin saber guardar las diferencias entre este presidente y los anteriores.

No creo que Andrés Manuel López Obrador no vaya a robar, ni creo que no vaya a ser corrupto, todos los políticos son lacras viviendo del pueblo, pero sí creo que hará cosas que otros no hicieron y, que el cambio le es molesto, por ahora, a los mediocres y acomodados (eres uno u otro, y por ello la democracia no es para todos, precisamente en eso radica su falla; no es para todos), pero después (así como los segundos pisos y el seguro popular), todo el que pueda estará beneficiándose de ello, escondiendo la cola entre las patas. ¡Ya los veré! ¡Ya los veré!

Esto no es una crítica a ex presidentes, mucho menos apoyo al actual, insisto... No confío en ninguno, pero sé distinguir debidamente; es una crítica a la opinión pública blandengue, descerebrada, fútil y carente en totalidad de sentido común.

DBCI
15/03/19